Con la simple intención de disfrutar, me planté en la línea de salida. A pie llevé un ritmo aceptable, sin forzar demasiado, buscando poder hacer una prueba donde no "arrastrarme" en el último segmento, teniendo en cuenta mi entreno hasta ahora. La carrera a pie, preciosa, con zonas de cierta dureza, en un entorno que nos es familiar a los atletas de aquí. Caminos donde solemos entrenar, sobre todo, en esta época del año.
El nivel de la competición fue máximo, contando con Emilio Martín como principal referente, y a la postre vencedor, pero también con otros grandísimos duatletas como Sergio Lorenzo, Doncel o Javi Macías. Esa era otra carrera, ganada como no por Emilio.
Ritmo de 3:50 en el primer 6000 a pie, corriendo siempre con sensación de tener otra marcha más pero controlando porque se podía hacer muy largo...
En bici, no compito. Voy intentando pedalear rápido cuando se puede, y arriesgar lo mínimo, dejando fácil el camino a los que me vienen adelantando. Disfruto también de la bici, sin el punto competitivo.
Al bajarme a correr para afrontar los últimos 3 km, mis piernas no están lógicamente muy castigadas y consigo correr decentemente, con fuerza, y a ritmo parejo al primer segmento. En meta entro sobre el puesto 100º, habiéndome divertido mucho, y con idea de volver el próximo año.