lunes, 26 de septiembre de 2011

Triatlón de Punta Umbría


Desde el 2006 no participaba en el triatlón de Punta Umbría. En el año 2007, lo hice pero se suspendió la parte del agua debido a las condiciones del mar ese día. Se corrió como duatlón. Desde ese 2007, debido casi siempre a que me coincidía con otras competiciones (Titán y Challenge Barcelona), o como en el 2009, que estuve enfermo, no había podido tomar parte en la salida en uno de los triatlones que más cerca de casa me coge, y de los primeros que hice cuando empecé a hacer triatlón.
Casi 350 inscritos, exito de participación, con un montaje de 10, con gradas supletorias en la recta de meta, con muchísimo público, y muchos debutantes, entre ellos mis amigos, los hermanos "Bernabé".
El nivel de la prueba fue alto, con un Samer que está haciendo una gran final de temporada, el cual venía de hacer un "top 10" campeonato de España Élite en Vigo.
Mi carrera era una incognita, y aunque últimamente he entrenado bien, no lo he hecho para una prueba de estas características, agónica desde el principio, donde es importante tener cierta "chispa", ya desde el agua, si quieres hacer un buen puesto. No he nadado mucho en las últimas semanas, y eso me hacía dudar más.
Se dió el bocinazo de salida, y aunque en los primeros metros cuesta bracear en condiciones, no recibí muchos golpes, y al llegar a la primera boya me noto bien con sensaciones positivas, nadando cómodo en el grupo que iba, con el cual hice toda la natación. Entre ellos y ellas, Elena Aguilar, Belen Donoso o David Callejón.
En estas pruebas, la transición marca mucho y unos segundos perdidos ahí pueden hacer que el grupo con el que salistes del agua, lo pierdas. Intenté hacer una buena transición, nadamos sin neopreno, así que rápido dejo gafas y gorro junto a la bici, me pongo el casco y salgo con la Giant. Cuando estoy a punto de subirme a la bici, me doy cuenta de que no me puse el dorsal. Me paro y rapido me lo pongo (iba sobre el manillar). A pesar de ello, el primero en salir de la T1 es Callejón, y mientras se coloca bien las zapatillas, lo alcanzo. Ya me relajo e intento calzarme también. Poco a poco se forma un grupo y nos ponemos a tirar. Delante llevábamos a 4 triatletas que habían salido unos segundos antes que nosotros del agua. Antonio Ostos va también en nuestro grupo e intenta que nadie deje de relevar, pero no lo hacemos de manera muy organizada. Durante la bici, intento tirar todo lo que puedo y en algún "palo" salgo detrás. Se nos unieron algunos triatletas más al grupo, y entre ellos va también Martínez Herránz.


Llegamos al final de la bici y me coloco en un lugar intermedio del grupo, haciendo una transición no muy rápida. En los primeros metros a pie, no voy bien, pero poco a poco voy alargando la zancada y notandome mejor. Martínez Herranz y Callejón salen unos metros antes que yo, así como 3 triatletas más, entre ellos Nelson Mestre y un mejicano. Les voy reduciendo distancia y antes del primer giro les he pasado, y poco después paso a Callejón. Mantengo un ritmo homogéneo pero no voy muy cómodo, he tenido mejores carreras a pie.



Durante el resto de la carrera, alterno puestos con Callejón hasta que él hace un cambio y se me va. Al final, en los últimos 200 metros alcanzo al último triatleta, entrando el 23º de la general, en 1h.02'.


Durante la prueba, se agradecen los ánimos, y sin duda, aquí los de Huelva corremos en casa.


Esta semana será de poco entreno, de preparativos, y de ganas de que llegue el sábado y con ello, el Titán, para mí, el mejor triatlón.
















miércoles, 21 de septiembre de 2011

Desconexión, descanso. ¿Cuánto tiempo?

¿Cuánto tiempo parar después de una temporada (en este caso como triatleta)? Desde luego no hay un tiempo fijo, ni nada se puede decir que es lo más adecuado para todos. Dependerá de cuestiones como lo cargada que haya estado esa, y anteriores temporadas, lo que nos vayamos a plantear para el siguiente año, las lesiones que hayamos tenido,... y sobre todo las ganas e ilusión que tengamos por entrenar.
En Marzo estuvo Gómez Noya en Huelva, y una de las cosas que nos comentó era que él, a diferencia de la mayoría de triatletas de élite mundial, para totalmente, no hace practicamente nada, e intenta desconectar totalmente.
En mi caso, normalmente he "parado" entre 2-3 semanas, haciendo otros deportes como pachangas futboleras con los colegas, partidillos de paddle, caminatas por el campo o BTT en plan "verano azul". La temporada pasada paré más tiempo (4 semanas) y no hice nada. Acabé más cansado, sobre todo mentalmente, y tuve algunos problemas físicos.
Este año, me apetece acabar ya. Aunque el Titán me motiva mucho, y en algunos entrenamientos entreno con muchas ganas, es el final de temporada más "pesado" que he tenido, llegando a estas últimas semanas con poca motivación (al final es lo que nos mueve).
Aunque ahora no quiero ni mucho menos plantearme nada para el próximo curso triatlético, lo que sí tengo claro, es que el "parón" será más largo, y la desconexión mayor.

En estas últimas semanas, de todos modos, han vuelto las buenas sensaciones (como en la media de Valverde), y seguro que el día 1, estaré con las mismas ganas en la línea de salida del Titán, como en los años 2008 y 2010.

martes, 6 de septiembre de 2011

Triatlón de Ayamonte y travesía de La Antilla

El fin de semana se presentaba entretenido. El sábado un triatlón sprint (no participaba en triatlones desde finales de junio) y el domingo una travesía a nado (la 3ª de este verano).
El triatlón se disputaba en Ayamonte, y aunque era la 7º edición, no había participado antes. El formato de la prueba lo cambiaron, pasando a ser un triatlón de carretera (antes, parte del recorrido discurría por la playa). Fue una prueba marcada por el segmento de agua, donde las corrientes hicieron que la mayoría de triatletas no hicieran el recorrido completo, por la imposibilidad de llegar a la primera boya. En mi caso, lo conseguí, la bordeé, e hice el recorrido que se presuponía, saliendo de esa boya como si me hubieran dado una paliza. Nunca lo había pasado tan mal en el agua. Mi primer pensamiento fue para los que venían más atrás, ya que en esa boya, el agua formaba un remolino que te llevaba hacia dentro. Los jueces con buen criterio, decidieron en un momento de la prueba, mandar a todos hacia las bicis. Al salir de esa boya, la corriente la tenías a favor, los primeros 2-3 minutos no iba, y a partir de ahí nadé fuerte. Tan fuerte que cuando me dí cuenta me habá alejado de la salida. Nadé hacia la orilla, ahora con la corriente en contra y salí bastante cansado del agua.

De camino a boxes veo que Alejandro Campoy viene conmigo, aunque la transición la hace mejor que yo. Se me va unos metros y comienzo a pedalar fuerte para alcanzarlo. Antes del 2º km contacté con él. El recorrido de bici es llano, aunque el viento sopla fuerte. Los dos nos entendemos para dar relevos y llegamos juntos a la T2 donde de nuevo es más rápido que yo y me saca unos metros. Poco a poco me va aumentando la ventaja. En la carrera a pie, adelanto a tres triatletas, entre ellos Nelson, un portugues que suele hacer las travesías de la zona. A pie, noto el esfuerzo tanto de la bici como de la natación y no voy muy fino pero intento ir fuerte, pensando en el Titán y lo que me espera allí. Entro el 14º en meta, con la peque.
Aunque el triatlón quedó deslucido por el segmento del agua, hay que animar al gran grupo de triatletas ayamontinos, que sigan con las mismas ganas de organizar estas complicadas pruebas, y seguro que el año que viene lo plantean de manera que se pueda disputar mejor este bonito triatlón.




El domingo, por la mañana temprano rodaje suave en bici, y a las 12:00 la travesía de La Antilla. El neopreno era opcional, así que a nadar con él. Desde las primeras brazadas me noté cansado, aunque intenté no despegarme del grupo de cabeza, cosa que al llegar a la primera boya, sucedió. Entreno de calidad, intentando mantener la posición hasta al final, entrando en meta en el puesto 7º de la general, en 17:15, para los 1200 metros.
Al finalizar, foto de familia...











jueves, 1 de septiembre de 2011

Entrenos y pocas competiciones

Este ha sido el verano que menos he competido. Sí he sacado tiempo para entrenar, y aunque ni mucho menos como los años 2008 y 2009, he podido completar buenos entrenamientos, sin prisas he intentando disfrutar. La carrera a pie he tardado en hacerla como me gusta, no he tenido buen "feeling", pero ya empiezo a mejorar. La natación, con muy poco volumen, pero con un alto porcentaje en el mar (y en una piscina de 10 metros). Ha sido seguro, el año que menos he nadado desde que hago triatlón. La bici, recorriendo otras carreteras, saliendo con el grupo de Lepe algún fin de semana, y compartiendo también entrenamientos con Fran "el coleta", Rafa, y Tomás principalmente. Conforme acumulo kilómetros, algunos de calidad (sobre todo en compañía), noto que las "patas" piden más.

En todo el verano, hice una travesía en julio en Isla Cristina, y a finales de agosto, una carrera popular en Villalba del Alcor, y una travesía ese mismo fin de semana en La Redondela.
La carrera a pie, dura, con dos subidas de unos 800 metros, teniendo que correr fuerte (no lo hacía desde finales de junio), y con las piernas bastante pesadas de la semana que llevaba. Me acompañó Fran, el cual hizo una gran carrera. Al día siguiente, quedamos para pegarnos una "paliza" en bici.
El domingo la travesía de la Redondela, que tenía algo más de 2000 m. El mar como un plato, y buenas sensaciones nadando. Fuí casi toda la prueba en paralelo con una nadadora (bastante más jovencita que yo), notando al final de la prueba, que a pesar de las sensaciones, la gasolina se empezaba a acabar. Me ganó en la última recta, entrando en meta el 13º de la general, y 3º de mi categorái, pudiendo compartir el podium con Rubén Gutierrez (recien llegado de cruzar el Estrecho) y subiendo con la pequeña Martina, que se colgó la medalla. Felíz.