martes, 8 de junio de 2010

Campeonato de Andalucía de Triatlón. "Medalla de chocolate"




Como cada temporada, me presenté al Campeonato de Andalucía de triatlón intentando estar en las mejores condiciones para disputarlo. Es de las citas que me marco con rojo en el calendario, y parte de la planificación va enfocada a ella. Finalmente pude entrenar regularmente, llevando a cabo entrenamientos que poco a poco han ido mejorando mis “prestaciones” en carrera aunque en el último mes y medio he arrastrado una tendinitis en el tendón rotuliano de la rodilla izquierda que, sobre todo con la carrera a pie, me ha limitado en los entrenamientos tanto a la hora de las “series” como en cuanto al volumen que quería realizar. De todos modos, iba con confianza a Torre del Mar, aunque me costó “enchufarme” a la prueba, y al contrario que otras competiciones, durante la semana, no estaba con la motivación necesaria. Eso cambió el día que llegamos donde disputaríamos el triatlón. El año anterior, a pesar de una caída en bici, realicé quizás el mejor triatlón que he disputado nunca en esta distancia, consiguiendo un 13º puesto absoluto y proclamándome campeón de Andalucía en mi grupo de edad, con un parcial a pie difícil de repetir. Este año iba con la “presión” de defender el título, algo que sabía que sería complicado, pero al mismo tiempo, ahí encontraba la motivación, y las ganas por competir.

Con Agustín, Cesar e Ismael, antes de la salida.
El viaje a Torre del Mar lo hice con Gabri, y allí quedamos con otros triatletas onubenses como Cesar, Toñi e Ismael. Vinieron también Joaquín y Belén, que se encargaron de apoyarnos, animarnos y del reportaje fotográfico. El día que llegamos, nos cambiamos, y nos fuimos a reconocer el circuito de bici. Esa tarde nos dimos cuenta de lo variado y duro que era, con un recorrido de ida y vuelta donde los primeros 8 kilómetros eran paralelos a la costa, prácticamente llanos, y a partir de ahí entrabas en la parte más dura del circuito, con algunas rampas del 11%.
La competición empezó a las 10:00 de la mañana, y una hora antes nos enteramos de que no se podía utilizar el neopreno. Según los jueces, estaba en el límite. Eso condicionó la carrera para muchos, entre otros para mí, ya que el frío no me va, y ya he tenido “malas experiencias” en travesías, saliendo con hipotermia del agua. En esta prueba, hubo varios abandonos por esta razón. Los jueces se equivocaron, y hubo muchas protestas respecto a esto.
La natación era a 2 vueltas de 750 metros cada una, teniendo que salir a la playa, y correr unos 50 metros antes de volver a nadar. La distancia fue mayor, acercándose a los 2.000 metros, debido a que una boya se movió del lugar donde la colocaron inicialmente. No me metí en el agua para “calentar”. La primera vuelta fui con buenas sensaciones, en un grupo con Rubén Bravo y mi amigo Agustín López. Tirando bien, y relativamente “cómodo”. Era un grupo de unos 7 triatletas. Salimos del agua, corrimos y nos volvimos a lanzar, y a partir de ahí, comencé a “bloquearme”, a no tener sensaciones, ni “coger agua”, poco a poco se me va el grupo. A mitad de esta segunda vuelta me absorbe otro grupo, del cual me cuesta seguir a pies la estela, pero consigo salir con ellos, con mucho esfuerzo y peleándome con el agua, y muy malas sensaciones (inicio de hipotermia).
T1, Ferni y Gabri, el maestro de las transiciones.

La transición la hago mal, lento, pierdo el grupo con el que salí del agua. Me acoplo, y comienzo a rodar solo pero me cuesta subir de 30 km/h. Alcanzo a otro triatleta, y con él hago los primeros kilómetros de bici.


Últimas rampas hasta Iznate.

No es hasta las primeras rampas, cuando comienzo a sentirme mejor. Poco a poco, remonto puestos. La gente se va quedando de los grupos que se formaron. Subiendo tengo muy buenas sensaciones, y bajando mis problemas habituales, teniendo que frenar más de la cuenta, y perdiendo ahí tiempo. Rubén Ruzafa me pasa poco antes de llegar a Iznate, y poco después un grupo de unos 5 triatletas con los que hago la última ascensión antes del giro de 180º. La vuelta tiene más bajada, y casi todo lo hago solo. Los últimos 10 kilómetros los hago con un grupo del que tiraba Ramón Boda (triatleta de gran nivel en bici), y en la recta paralela a la costa, colaboro con los relevos.

Carrera a pie, por el paseo marítimo, con mucho calor.

Transición mejor que la primera, y salgo a correr fuerte, pero sabiendo que no me podía “colar” con el ritmo. La rodilla no me duele. La carrera a pie fue por el paseo marítimo, y se me hacen muy duros los últimos 2 kilómetros, notando ahí la falta de volumen a pie. Hice un buen parcial, el 13º a 3:40 el kilómetro, remontando puestos, pero sufriendo mucho al final. El puesto de la general fue el 26º, y finalmente, hice el 4º de mi categoría, “medalla de chocolate”, lo cual te deja con mal sabor, pero mejor no lo pude hacer, en una carrera con mucho nivel, ganada por nuestro amigo Samer Ali Saad, con una gran remontada a pie, demostrando una vez más su calidad.

Campeona de Andalucía.

Mención especial para Toñi Luna, que no deja de sorprenderme, consiguiendo su primer Campeonato de Andalucía (primera fémina onubense que lo consigue), y 6ª de la general femenina, en una carrera muy complicada desde el inicio.
Triatlón recomendable, sobre todo si es distancia olímpica, y al que creo que acudiré en otras ediciones. Ahora una semanita de “descanso”, sobre todo a pie, ya que al final de la prueba tuve, de nuevo, molestias en la rodilla. Toca un poco de triatlón cross en casa







3 comentarios:

Ismael dijo...

Bonita prueba, sobre todo la bici, algo más que olímpica, por el agua que rondó los 1900 y por la subida que por momentos parecía el principio del Boyar. Gran puesto Juan, y felicidades a TOÑI, no fue fácil hacerlo tan bien.
Ismael

Antonio Ruiz dijo...

Bueno chaval, al menos demostraste tu poderío, con tanta remontada y sintiéndote cada vez "menos mal"

Enhorabuena por esa medalla de chocolate.

Un abrazo.

Juan González dijo...

Ismael, a mi también me recordó algo al Titán, con las distancias más recortaditas, pero la verdad que es una prueba que si vas justo, lo pasas mal. Esperemos que el año que viene haya algo parecido en La Palma...

Antonio, el frío no "está pa´´mí", y menos ahora que voy justo de "reservas". Dale un beso a Angela, nos vemos.